Las alarmas son una medida de seguridad muy común y su utilidad está más que demostrada. Por ello, el mercado ofrece y pone a disposición del público una variedad enorme de posibilidades y presupuestos. Como no todas proporcionan el mismo nivel de seguridad, este es un dato medible que, en función de las características del equipo instalado, el cual establece el grado de protección de una zona.
Existen cuatro niveles de seguridad distintos según una clasificación oficial. Esta estratificación está contemplada en la Norma UNE-EN 50131-1. Este marco legal establece cuatro grados en función del riesgo.
Por eso, de acuerdo a naturaleza y particularidades del edificio en el que se va a hacer la instalación y de la obligatoriedad de estar conectados a una central o centro de control de alarmas, se considera el 1 como en menor y el 4 como el mayor.
Nivel de seguridad 1: bajo riesgo
Se incluyen aquí todas las alarmas que emiten señales acústicas, pero que no están conectadas a sistemas de seguridad o a una central receptora de alarmas.
Solo se aconsejan ser instaladas en zonas de muy bajo riesgo y su funcionamiento es similar al de las alarmas de un coche. En lugar de proporcionar una protección completa, su función es disuasoria.
Muchas alarmas para el hogar son de este tipo, más aún si son comunidades de vecinos con seguridad adicional como personal de vigilancia o accesos restringidos con cerraduras de alta seguridad.
Nivel de seguridad 2: riesgo bajo a medio
La mayoría de los sistemas de alarma y seguridad se hallan en este nivel. Son circuitos conectados a centrales de alarma. Además, son los más típicos en hogares, organizaciones y corporaciones.
La mayoría de las alarmas para empresas están en este renglón. Esta modalidad permite a los usuarios de aplicaciones de seguridad en teléfonos móviles poder controlarlos a distancia.
Nivel de Seguridad 3: riesgo medio a alto
Estas alarmas son las destinadas a lugares especialmente expuestos a la delincuencia o zonas vulnerables.
Almacenes, instalaciones industriales con mercancías de alto valor y otros negocios sensibles a la seguridad serían ejemplos de ello, al igual que empresas, transporte y logística, joyería y artículos de lujo en general.
Son sistemas muy sofisticados y están conectados a centrales de gestión de alarmas que ofrecen respuestas especializadas. Por eso se les considera alarmas para negocios que requieren vigilancia las 24 horas del día.
Nivel de Seguridad 4: riesgo alto
Para las instalaciones importantes y los entornos más seguros se diseña este máximo nivel de seguridad.
Por ejemplo, se usa en naves industriales que albergan explosivos, residuos radiactivos o artículos extremadamente valiosos. También satisface los criterios de las instalaciones militares o gubernamentales como embajadas en países en conflicto y similares.
¿Cuál es la mejor alarma o sistema de seguridad?
No existe un sistema de seguridad bueno o uno malo. El que será idóneo es el que se adapta mejor al entorno que debe proteger y no el que tiene más opciones.
Hay que recordar esto a la hora de elegir la alarma que mejor se adapte a las necesidades específicas de cada sitio. La eficacia y la tranquilidad aumentarán si se consulta a expertos que pueden dar asesoría para los mejores equipos.
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